Este coche es un modelo conocido que corre 45 kilómetros por hora que también puede correr en el carril bici. Dos participantes toman sitio, se abrochan los cinturones y activan el gps.
En cuanto los participantes giran el volante hacia la derecha el coche empieza a bascular y a girar sobre su eje.
De esta forma los participantes cuelgan boca abajo, como un pollo a l’ ast. Con los pelos de punta y una mirada sorprendida se hace una foto a través del parabrisas.
Con otra vuelta al volante el coche se vuelve a girar hasta recuperar su posición vertical.
Los artistas vienen de Países Bajos