¡Déje paso para estas visitantes distinguidas! A estas damas les encanta presumir con sus preciosas faldas. Pero lo que prefieren aún más es que sean recibidas con una reverencia, ya que actúan de forma terriblemente condescendiente. Su pobre sirvienta lo experimenta a diario. Parece divertirles humillarla y enviarla a buscar cualquier cosa. ¿Pero cuánto aguantará la sirvienta?
Los artistas vienen de los Países Bajos